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.Las estanter�as se alzaban hasta el techo, los tomos en ellas colocados en "doble fila", una hilera bloqueando a la otra.La mayor�a eran de poes�a y narrativa, con mucha fantas�a y misterio incluidos.Clary recordaba haberse abierto camino a trav�s de Las cr�nicas de Pridain all�, enroscada en el asiento empotrado bajo la ventana de Luke mientras el sol se pon�a sobre el East River.-Creo que todav�a anda por aqu� �grit� Sim�n, de pie en la entrada de la peque�a cocina de Luke-.La cafetera el�ctrica est� encendida y hay caf� aqu�.Todav�a caliente.Clary mir� al otro lado de la puerta de la cocina.Hab�a platos amontonados en el fregadero, y las chaquetas de Luke estaban pulcramente colgadas en ganchos en el interior del armario de la ropa.Avanz� por el pasillo y abri� la puerta del peque�o dormitorio.Ten�a el mismo aspecto de siempre, la cama sin hacer con su cobertor gris y unos almohadones planos, la parte superior de la c�moda cubierta de monedas sueltas.Se dio la vuelta.Una parte de ella hab�a estado absolutamente segura de que, cuando entraran, encontrar�an el lugar destrozado, y a Luke atado, herido o peor.En aquellos momentos no sab�a qu� pensar.Como atontada, cruz� el vest�bulo hasta el peque�o dormitorio de invitados, donde tan a menudo hab�a dormido cuando su madre estaba fuera de la ciudad por negocios.Acostumbraban a quedarse despiertos hasta tarde viendo viejas pel�culas de terror en el parpadeante televisor en blanco y negro.Ella incluso guardaba una mochila llena de material extra aqu� para no tener que acarrear sus cosas de una casa a otra.Arrodill�ndose, la sac� de debajo de la cama arrastr�ndola por la correa verde oliva.Estaba cubierta de distintivos que, en su mayor�a, le hab�a dado Sim�n."LOS JUGADORES LO HACEN MEJOR.CHICA OTAKU.SIGO SIN SER REY." Dentro hab�a algunas prendas dobladas, unas cuantas mudas de ropa interior, un cepillo e incluso champ�."Gracias a Dios", pens�, y cerr� la puerta del dormitorio de una patada.Se cambi� a toda prisa; se sac� la ropa de Isabelle, excesivamente grande, y ya manchada de hierba y sudada, y se puso unos pantalones de pana pulidos a la arena, suaves como papel desgastado, y una camiseta azul sin mangas y con un dibujo de caracteres chinos en la parte frontal.Meti� la ropa de Isabelle en la mochila, tir� del cord�n para cerrarla y abandon� el dormitorio, con la mochila rebot�ndole tranquilamente entre los om�platos.Era agradable tener algo propio otra vez.Encontr� a Jace en la oficina repleta de libros de Luke, examinando una bolsa de lona verde que descansaba sobre el escritorio con la cremallera abierta.Estaba, tal y comoSim�n hab�a dicho, repleta de armas: cuchillos envainados, un l�tigo enrollado y algo que parec�a un disco de metal de bordes sumamente afilados.-Es un chakram �explic� Jace, alzando la vista cuando Clary entr� en la habitaci�n-.Un arma sikh.La haces girar alrededor del �ndice antes de soltarla.Son raras y dif�ciles de usar.Es extra�o que Luke tuviera una.Era el arma preferida de Hodge, en aquellos tiempos.O eso dice �l.-Luke colecciona cosas.Objetos de arte.Ya sabes �coment� Clary, indicando el estante de detr�s del escritorio, que estaba cubierto de figuras de bronce hind�es y rusas.Su favorita era una estatuilla de la diosa india de la destrucci�n, Kali, empu�ando una espada y una cabeza cortada, mientras danzaba con la cabeza echada hacia atr�s y los ojos entrecerrados, como rendijas.Al lado del escritorio hab�a un antiguo biombo chino, tallado en reluciente palisandro.-Cosas bonitas.Jace apart� el chakram con delicadeza.Un pu�ado de prendas se derram� por el extremo sin atar de la bolsa de lona de Luke, c�mo si hubiera sido una idea de �ltimo momento.-A prop�sito, creo que esto es tuyo.Extrajo un objeto rectangular oculto entre las ropas: una fotograf�a en un marco de madera con una grieta vertical a lo largo del cristal.La grieta arrojaba una red de finas l�neas sobre los rostros sonrientes de Clary, Luke y su madre.-S� que es m�o �dijo Clary, tom�ndolo de su mano.-Est� roto �coment� Jace.-Lo s�.Yo lo hice., la hice pedazos.Cuando se la arroj� al demonio rapi�ador.�Le mir�, viendo c�mo la comprensi�n aparec�a en su rostro-.Eso significa que Luke ha estado en el apartamento despu�s del ataque.Quiz� incluso hoy.-Debe de haber sido la �ltima persona en pasar por el Portal �dijo Jace-.Por eso nos trajo aqu�.T� no pensabas en ning�n lugar, de modo que nos envi� al �ltimo lugar en el que hab�a estado.-Qu� amabilidad la de Dorothea al decirnos que estuvo all� �coment� Clary.-Probablemente �l le pag� para que callara.O eso o ella conf�a en �l m�s de lo que conf�a en nosotros.Lo que significa que podr�a no estar.-�Chicos! �Era Sim�n, entrando como una exhalaci�n en la oficina presa del p�nico-.Alguien viene.Clary solt� la foto.-�Es Luke? Sim�n volvi� a mirar pasillo abajo, luego asinti�.-Lo es.Pero no viene solo; hay otros dos hombres con �l.-�Hombres? Jace cruz� la estancia en unas pocas zancadas, mir� a trav�s del marco de la puerta y escupi� una maldici�n en voz baja.-Brujos.Clary le mir� at�nita.-�Brujos? Pero.Negando con la cabeza, Jace se apart� de la puerta.-�Hay alg�n otro modo de salir de aqu�? �Una puerta trasera? Clary movi� negativamente la cabeza.El sonido de pisadas en el pasillo era ya audible, caus�ndole punzadas de temor en el pecho.Jace mir� a su alrededor con desesperaci�n.Sus ojos se posaron en el biombo de palisandro.-Colocaos ah� detr�s �dijo, se�al�ndolo-.Ahora.Clary dej� la fotograf�a agrietada sobre el escritorio y se desliz� detr�s del biombo, arrastrando a Sim�n tras ella.Jace iba justo detr�s de ellos, con la estela en la mano.Apenas hab�a conseguido ocultarse Jace, cuando Clary oy� c�mo la puerta se abr�a de par en par, y el sonido de personas que entraban en la oficina de Luke., luego voces.Tres hombres que hablaban.Mir�nerviosamente a Sim�n, que estaba muy p�lido, y luego a Jace, que hab�a alzado la estela y mov�a la punta ligeramente, dibujando una especie de figura cuadrada, sobre la parte posterior del biombo.Mientras Clary observaba fijamente, el cuadrado se torn� transparente, como una hoja de cristal.Oy� tomar aire a Sim�n, un sonido diminuto, apenas audible, y Jace sacudi� la cabeza mir�ndolos, mientras articulaba en silencio: "Ellos no pueden vernos, pero nosotros podemos verles".Mordi�ndose el labio, Clary se acerc� al borde del cuadrado y mir� por �l, consciente de la presencia de Sim�n respirando sobre su cogote.Ve�a la habitaci�n del otro lado perfectamente: las estanter�as, el escritorio con la bolsa de lona tirada encima.y a Luke, con aspecto desali�ado y ligeramente encorvado, con las gafas colocadas en lo alto de la cabeza, de pie cerca de la puerta
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