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.La mujer, para que Federigo por acaso no sospechase otra cosa y se enojase con ella, deliberó que ten�a que levantarse yhacerle o�r que Gianni estaba dentro, y dijo al marido:-Muy bien, t� di tus palabras; yo por mi parte no me tendr� por salvada ni segura si no lo conjuramos, ya que est�s t� aqu�.Dijo Gianni:-�Pues cómo se le conjura?Dijo la mujer:-Yo bien lo s�, que antier, cuando fui a Fi�sole a ganar las indulgencias, una de aquellas ermita�as que es, Gianni m�o, lacosa m�s santa que Dios te diga por m�, vi�ndome tan medrosa me ense�ó una santa y buena oración, y dijo que la hab�aprobado muchas veces antes de ser ermita�a y siempre le hab�a servido.Pero Dios sabe que sola nunca me habr�a atrevido a ira probarla; Pero ahora que est�s t�, quiero que vayamos a conjurarlo.Gianni dijo que muy bien le parec�a; y levant�ndose, se fueron los dos calladamente a la puerta, fuera de la cual todav�aFederigo, ya sospechando, estaba; y llegados all�, dijo la mujer a Gianni:Comment: En los conjuros era-Ahora escupe cuando yo te lo diga.considerado muy eficaz escupir.Dijo Gianni:-Bien.Y la mujer comenzó la oración, y dijo:-Espantajo, espantajo, que por la noche vas, con la cola tiesa viniste, con la cola tiesa te ir�s; vete al huerto junto almelocotonero, all� hay grasa tiznada y cien cagajones de mi gallina; cata el frasco y vete deprisa, y no hagas da�o ni a m� ni ami Gianni.Y dicho as�, dijo al marido:-�Escupe, Gianni!Y Gianni escupió; y Federigo, que fuera estaba y esto o�do, ya desvanecidos los celos, con toda su melancol�a ten�a tantasganas de re�r que estallaba, y en voz baja, cuando Gianni escup�a, dec�a:-Los dientes.La mujer, luego de que en esta guisa hubo conjurado tres veces al espantajo, a la cama volvió con su marido.Federigo,que con ella esperaba cenar, no habiendo cenado y habiendo bien las palabras de la oración entendido, se fue al huerto y juntoal melocotonero encontrando los dos capones y el vino y los huevos, se los llevó a casa y cenó con gran gusto; y luego las otrasveces que se encontró con la mujer mucho con ella rió de este conjuro.Es cierto que dicen algunos que s� hab�a vuelto la mujer la calavera del burro hacia Fi�sole, pero que un labrador quepasaba por la vi�a le hab�a dado con un bastón y le hab�a hecho dar vueltas, y se hab�a quedado mirando a Florencia, y por elloFederigo, creyendo que le llamaban, hab�a venido, y que la mujer hab�a dicho la oración de esta guisa: �Espantajo, espantajo,vete con Dios, que la calavera del burro no la volv� yo, que otro fue, que Dios le d� castigo y yo estoy aqu� con el Gianni m�o�;por lo que, y�ndose, sin albergue y sin cena se hab�a quedado.Pero una vecina m�a, que es una mujer muy vieja, me dice queuna y otra fueron verdad, seg�n lo que ella de ni�a hab�a o�do, pero que la �ltima no a Gianni Lotteringhi hab�a sucedido sino auno que se llamó Gianni de Nello, que estaba en Porta San Pietro no menos completo bobalicón que lo fue Gianni Lotteringhi.Comment: Giovanni de Nello fue unboticario florentino, muy devoto y amigoY por ello, caras se�oras m�as, a vuestra elección dejo tomar la que m�s os plazca de las dos, o si quer�is las dos: tienende los frailes, muerto el 16 de noviembremuch�sima virtud para tales cosas, como por experiencia hab�is o�do; aprendedlas y ojal� os sirvan.de 1347 y enterrado en Santa Mar�a laNueva.Su mujer se llamaba Emiliana, yG.Billanovich se�ala la posible intenciónde Boccaccio de hacer bur la de �l porNOVELA SEGUNDAquien puede representar a su propiamujer: la noveladora Emilia quien, seg�nPeronella mete a su amante en una tinaja al volver su marido a casa; la cual habi�ndola vendido el marido, ella le dice que lahipótesis del mismo Billanovich, pudo serha vendido ella a uno que est� dentro mirando a ver si le parece bien entera; el cual, saliendo fuera, hace que el marido laamada por Boccaccio.raspe y luego se la lleve a su casa
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